Martes Santo, Procesion de La Piedad

La Procesión de las Lagrimas de María o mas conocida como la procesión de “La Piedad”, nos lleva hasta el momento donde María recoge a su hijo que es bajado de la cruz. Sentimiento de dolor, desolación, el hijo muerto en las manos de su madre, llora.

Jesús, recogido en los brazos de su madre nos muestra el momento mas doloroso que puede sentir una madre.

La cofradía que organiza el acto procesional, El Descendimiento, comienza su recorrido desde la S.I Catedral.

El sonido del tambor, nos empieza a retumbar cerca de las 9:45 de la noche cuando desde el barrio del Entremuro los tambores salen porque tienen su cuarto para guardar los instrumentos. Es una sección que cuenta con bastantes tambores y bombos por lo que podríamos decir que el sonido es mas fuerte y espectacular.

Vemos salir de la Catedral, a el paso, llevado únicamente por mujeres ya que se saco la idea de comprar el paso siempre y cuando fuera llevado por las mujeres que son las que mas representadas están en el paso. La madre que tiene a su hijo. Comienza a salir al completo el paso, siempre con cuidado por las escaleras que están en la parte de la plaza Palacio.

Los tambores y cornetas tocan sus marchas y el paso de La Piedad se ve reflejado en las fachadas de las casas, una imagen muy bonita y espectacular.

La procesión recorre el Ayuntamiento y el Coso y vuelve a su sede.

Como en otras procesiones ya expuestas en el blog, la sección de instrumentos se coloca a los lados de la entrada de la S.I Catedral donde realizan la entrada de paso.

El paso comienza a entrar al templo y los tambores comienzan a ponernos el bello de punta, porque entra un paso a un templo, la casa de Dios y esto hace que sea importante. Los tambores, nos muestran con su toque que cada golpe de bombo son las palpitaciones del corazón, palpitación que tendría su madre con su hijo muerto, en brazos.

Esta procesión es pequeña en cuanto a componentes y penitentes porque es una procesión en un día de trabajo y que podríamos decir que es de nueva creación por lo que en los primeros años cuenta con un numero de gente inferior a otras de la ciudad. No por ello tiene menor significado y pasión, porque la pasión se siente dentro de uno mismo. Hay un refrán que dice que la pasión por algo no se cuenta en numero de personas sino de palpitaciones que sientas en la procesión y como a todos los que sentimos esto me imagino que sera mucho lo que se siente dentro.